17 cosas que pasarían si todo el mundo se hiciera vegano
Introducción
En los últimos años, el auge del veganismo ha despertado toda clase de sentimientos encontrados en nuestra sociedad. La existencia de innumerables intereses personales en su contra ha suscitado los temores de la industria de la explotación animal y las reacciones viscerales de miles de individuos.
En un ensayo previo me dirigí a otros veganos para resolver la pregunta de si el mundo se hará vegano algún día. En este artículo, en cambio, me enfocaré en quienes todavía no son veganos para abarcar la pregunta manida acerca de qué pasaría si todo el mundo se hiciera vegano.
Con frecuencia, esta cuestión aparece presentada mediante otros parafraseos similares: «¿Qué pasaría si todos fuéramos veganos?», «¿Qué ocurriría si toda la gente se hiciera vegana?», «¿Qué sucedería si los veganos conquistaran el mundo?».
Hay mucha tela que cortar, así pues, vayamos por partes.
En este artículo de la BBC se plantea y afirma a base de anécdotas —sin aportar ningún estudio o prueba relevante o confirmatoria— que una dieta vegana reduce la inteligencia, deteriora el desarrollo cerebral infantil y causa déficit en todos los nutrientes existentes en el universo. Esto último no lo han dicho así, pues hasta el menos avispado se reiría de este despropósito.Los medios de comunicación buscan dañar a propósito la imagen del veganismo por sus propios intereses
Este epígrafe debería grabarse a fuego en la mente de los lectores. Esto no es un secreto o una afirmación apresurada. Los medios de comunicación pertenecen a grupos empresariales que giran en torno a bancos, farmacéuticas y gigantescos negocios basados en la alimentación humana y, por extensión, en la explotación animal. Sin tapujos ni ética profesional alguna, a diario nos encontramos con centenares de artículos y ensayos de dudosa reputación, con argumentos vacíos y notablemente manipuladores.
No hay día en que no se publique en un periódico alguna supuesta noticia o consejo nutricional donde se ponga en titular y subtítulos que una dieta vegetal sea deficitaria, dañina, que cause alteraciones del sistema nervioso y, cómo no, que sea terrible para los niños. Esta última apelación al paternalismo no puede faltar en todo escrito antivegano. ¿Alguien recuerda a la esposa del reverendo en Los Simpson?
Para cualquier persona objetiva resultaría deleznable que estos supuestos expertos se dediquen a exponer afirmaciones contrarias a los estudios académicos o, en el mejor de los casos, a exagerar o tratar con alarmismo algunas simples recomendaciones o advertencias de puro sentido común.
Si alguien revisa el enlace a la noticia se encontrará con una concatenación infinita de perlas. Creo yo que cualquier persona seria concluiría que, si fueran ciertas todas las hipótesis vertidas en el artículo, un vegano moriría a las pocas semanas de serlo.La BBC es el medio antivegano más manipulador del mundo
Podría afirmar que, tras todos mis años siendo vegano y soportando calumnias, ataques y los testimonios atragantables de falsos veganos que dejaron de serlo «porque sus cuerpos lo necesitaban» (expresado de forma literal por algunos), la BBC es la que ha puesto el listón más alto de todos.
A la pregunta de qué pasaría si todo el mundo se hiciera vegano, en la BBC responden: te pasará todo lo malo del mundo. Te faltará hierro, taurina, creatina, vitamina B12, calcio y omega 3 y todos aquellos nutrientes vinculados a campañas publicitarias de productos como la carne, la leche o los huevos, de aquellas empresas que patrocinan dichos contenidos de la BBC.
Ningún artículo antivegano que se precie puede concluir sin aducir la muerte de menores. Se advierte que se trataba de «veganos mal informados», pero se hace énfasis en los padres para relacionar la práctica del veganismo a algo complejo, complicado y arriesgado para los menores. No hablarán sobre padres mal informados que les dan hamburguesas a sus hijos todos los días.Según la BBC, los niños entran en coma por culpa del veganismo
Yo sí puedo decir algo en el caso específico de la cognición: pondría la mano en el fuego para señalar que, si se realizara un estudio sobre el cociente intelectual medio de la gente vegana y se comparase con la media mundial, seguramente obtendríamos un resultado ligeramente superior. Parafraseando el texto que acompaña a la imagen del artículo de la BBC: creo que el colesterol y el ácido úrico están afectando a la capacidad de pensar de los especistas.
La razón no está en que ser vegano nos vuelva más inteligentes —mejor no le daré ideas a algún patán o lo publicará en un periódico—, sino que el mero hecho de dar el paso hacia el veganismo implica la posesión de una sensibilidad, curiosidad, empatía y adaptación al cambio.
Estos rasgos se correlacionan con nuestros conocimientos actuales sobre el cerebro y su plasticidad para adaptarse a los cambios y sobrevivir en el seno de una sociedad especista y que vierte constante majaradas como las presentes. O sea, es probable quien sea vegano haya logrado serlo porque su comprensión de los animales y de sus acciones supera el umbral del especista promedio.
¿Qué credibilidad u honestidad puede haber en un artículo que usa un lenguaje impreciso, erróneo y que confunde categorías? El consumo de creatina ayudar a mejorar la atención y la fatiga muscular. Esto equivaldría a doparnos de una biomolécula que sintetiza nuestro propio organismo. Sin embargo, de este hecho no se deduce que los veganos tengan necesariamente un déficit ni que se consumo sea necesario, siquiera para deportistas.Estos expertos de la BBC hablan sobre veganismo sin tener ni idea de qué va
Llama la atención que los periodistas, reporteros o dietistas que firman estas columnas o aparecen citados, se atrevan a hablar sobre las consecuencias del veganismo pero no sean ni capaces de plasmar correctamente la razón por la cual alguien se hace vegano.
Tales expertos muestran una seguridad y contundencia máxima sobre los riesgos y peligros del veganismo mientras defienden la ganadería tradicional y el consumo de carne apelando a la «dieta natural de nuestra especie». Parecen olvidar, selectivamente, que las enfermedades alimentarias más graves, así como innumerables patologías e infecciones, derivan del consumo de productos de origen animal.
Nadie pone el grito en el cielo ni maldice la carne de cerdo o los huevos cuando se producen casos de cisticercosis o de salmonela. En ese caso, los expertos sólo recomiendan precaución y atención al envasado y a las medidas de conservación pertinentes.
Cuando hay emergencias de este tipo, los entendidos —pagados por la industria— se dedican a realizar un control de daños para asegurarse de que hasta el más listo del pueblo continúe comiendo y comprando cadáveres y secreciones con normalidad. Ninguno querría que la gente le cogiera miedo o asco a los jamones o a la ovulación carbonato-cálcico-encapsulada de una gallina. ¡Qué sería de los pobres ganaderos y avicultores!
Por el contrario, cuando nos referimos a productos de origen vegetal y a gente que no sufre ninguna patología, estos mismos expertos claman con preocupación sobre supuestas graves deficiencias que no suelen producirse o cuya causa tiene un menor cuadro clínico que terminar muerto por una infección. Esa doble vara de medir es el resultado de la combinación perfecta entre ignorancia, inercia social y participación en la industria ganadera.
Los medios antiveganos, como la BBC, no se esfuerzan siquiera en crear relatos elaborados. Les basta con contactar con gente que fue supuestamente vegana —aunque sus propias palabras evidencien lo contrario— y narrar las terribles consecuencias de salud que tuvo para esta persona hasta volver a ingerir productos de origen animal. Estamos ante un ejemplo manifiesto de sensacionalismo barato para camuflar una estrategia típica de la acción-reacción: ellos describen el problema (el veganismo) y dan la solución (dejarlo).Técnicas y estrategias de manipulación
Como iba exponiendo, ya fuere por simple desconocimiento o para manipular a las masas, cada dos por tres se publican centenares de noticias sensacionalistas, falsas y que violan el sentido común y cualquier atisbo de conocimiento científico, cuyo único fin radica en pervertir e intoxicar el movimiento vegano al asustar, meter miedo e incertidumbre a quienes tan sólo oigan la palabra «veganismo».
En otras entradas anteriores ya he hablado sobre cómo, cuándo y por qué los gobiernos y empresas, a través de los medios de comunicación, se dedican a imponer su agenda para mantener que sus esclavos (ciudadanos o consumidores) sigan creyendo y confiando en las élites sociales. Recomiendo leer los enlaces que figuran los términos resaltados para ahondar en los ejemplos de cada caso.
Existen muchas maneras de difamar y contrarrestar cualquier ideología de progreso. Lo mismo le sucedió en su época al movimiento abolicionista de la esclavitud negra. En general, los enemigos del bien y de la justicia recurren a dos técnicas para combatir e invisibilizar un cambio, petición o revolución justa. Al aplicar la primera técnica intentan combatir lo que es y, con la segunda, aspiran a combatir aquellas consecuencias que tendría para sus propios intereses personales:
- Lanzan ataques personales, lingüísticos y tergiversaciones sobre los ideales y objetivos de quienes apoyan un movimiento por la justicia. Pasan a decir, públicamente, que los veganos y otras personas somos enfermos, sectarios, fanáticos, radicales, violentos, colgados y un largo etcétera. Se apoyan en citas y apelaciones a la autoridad para alegar que el veganismo o sus bases carecen de sentido. Y, cuando estas alusiones sin fundamento no les basta, buscan anular los argumentos de quienes somos veganos tergiversando o banalizando nuestros principios. ¿Veganos por moda? ¿Veganos por salud? ¿Veganos que se beben su propia sangre? ¿Veganos que malnutren, maltratan y asesinan a sus hijos? Les sirve traer a la palestra a quien pretenda llamar la atención o inventarse cualquier calumnia.
- Lanzan falsos razonamientos cargados de infundios, asunciones perjuiciosas y sesgos asentados entre la población para achacar que el veganismo y los veganos causaremos graves consecuencias en el mundo: desnutrición civil, crisis sanitarias, deforestación masiva para plantar soja, aumentos en el precio de los alimentos básicos, guerras por el agua potable, invasión de animales domesticados, desaparición de especies domesticadas, extinción de especies, proliferación de plagas, pérdida de patrimonio cultural, cese de deportes antiguos, abandono del medio rural, alteración de nuestra biología, etc. Sí, al veganismo y a los veganos se nos acusa de todos los males habidos y por haber en el mundo. A algunos sólo les falta decir que promovamos el apocalipsis. Sólo les queda afirmar que nuestros pedos emiten mayor cantidad de metano que los miles de millones de animales rumiantes esclavizados como ganado. Si cuela, cuela.
Mucha visceralidad, pero pocos conocimientos sobre las consecuencias del veganismo
A quienes nos preocupa nuestra formación y cultura, buscamos responder con lógica y objetividad a los hechos y resultados de nuestras acciones y de las de otros. Sin embargo, esta premisa no suele cumplirse en el seno de una sociedad visceral y convencida de que su acceso a internet y su facultad para exponer sus opiniones ya garantice la veracidad o coherencia de las mismas.
¿Qué sucede cuando tales individuos se preguntan sobre qué pasaría si todo el mundo se hiciera vegano? En su intento de razonar, lejos de elucubrar un pensamiento interno, buscan conocer las consecuencias del veganismo para sus vidas confiando ciegamente en el primer medio que hallen o en aquello más repetido. Y, con demasiada frecuencia, encontramos que tales sujetos ni siquiera poseen ideas claras sobre derecho, leyes, éticas o la propia moralidad de sus acciones, ni siquiera contra niños y otros humanos.
En general, la gente llega a conclusiones estúpidas que se ven reforzadas por aquellas argumentaciones —igualmente mediocres e inventadas— de quienes pagan para que dicha información se promueva. Todavía hoy hay gente que cree que los periódicos, los noticieros o los telediarios están para informar. No, amigo. Están para venderte una verdad que coincide con sus intereses; no con los tuyos.
A diario, observo que la mayoría de la sociedad es francamente imbécil. Y esto no es un insulto, sino la descripción de una realidad o, si acaso, de una percepción personal. Si alguien se gasta su sueldo en una droga que lo mata lentamente (p. ej. tabaco), invierte su sueldo en tragaperras o expone su vida para ahorrar dos segundos al cruzar una carretera —por donde no debería— mientras luego continúa andando a paso de tortuga, estamos ante la señal de que tales sujetos no actúan con lógica.
Algo que debe aprender todo niño en su paso a la adultez está en que los adultos no siempre tienen razón ni saben todas las respuestas.
En mi paso a la adultez, descubrí que la mayor parte de los adultos son básicamente niños más grandes e imbéciles, con menor capacidad de aprendizaje y escasa honestidad, que incluso hablan y afirman con atrevimiento, prejuicios y sesgos personales mucho mayores que niños y jóvenes sobre temas en que no están formados o en los que sobrevaloran su formación.
El veganismo es un camino hacia la justicia para los animales. Hacer lo correcto es importante por sí mismo.¿Qué pasaría si todo el mundo se hiciera vegano? Consecuencias del veganismo estudiadas científicamente
Abarcar todas las consecuencias que tendría el veganismo a nivel social, medioambiental y económico sería una tarea titánica y no alcanzaría siquiera con una tesis doctoral. En otros textos anteriores me he centrado específicamente en analizar las razones fundamentales de por qué debemos ser veganos.
Una vez expuestos los precedentes de esta disertación, mi intención aquí consiste en resumir algunas hipótesis estudiadas y aceptadas científicamente sobre la pregunta de qué pasaría si todo el mundo se hiciera vegano.
A modo de informes preliminares y exhaustivos, aconsejo revisar el estudio oficial de la FAO sobre el impacto de la ganadería, un estudio de la Universidad de Oxford acerca de la contaminación asociada al consumo de carne, un artículo académico publicado en Nature sobre la importancia del veganismo para luchar contra la deforestación y el cambio climático, y otros estudios los beneficios de una dieta vegetal para la humanidad.
Relación entre el veganismo y sus consecuencias
Nunca queda de más recordar que el veganismo es un principio ético referido al cese de la explotación animal en reconocimiento de que los demás animales, como nosotros, sienten, padecen, poseen conciencia e intereses inalienables. El único fin perseguido por el veganismo es la supresión absoluta y permanente de la esclavitud animal por fruto de su reificación legal.
Las consecuencias del veganismo buscan ser beneficiosas para los animales —las víctimas— y no necesariamente para los humanos, aun así, su práctica sí conlleva beneficios absolutos para nosotros y el medio ambiente.
Si todo el mundo se hiciera vegano...
A continuación, sin ningún orden en particular, enumeraré 17 cosas que pasarían si todo el mundo se hiciera vegano. Mi intención al enumerarlas de esta manera está en emplear el sensacionalismo de tales medios en su contra para promover justo lo contrario que ellos.
Mientras medios como la BBC justifican y promueven la miseria y muerte de millones de animales a base de falsedades, aquí dejo las consecuencias reales que tales medios callan:
Consecuencias éticas del veganismo
- Se salvarían miles de millones de animales que hubieran sido criados o capturados de por vida con el único propósito de degustar sus cadáveres o explotados para vestimenta, exhibición, entretenimiento u otros fines.
- Millones de animales podrían recibir protección legal tras la incorporación de leyes que los amparasen como sujetos de derecho. Esto impediría el asesinato, el envenenamiento y toda clase de prácticas crueles perpetradas contra ellos a diario.
- Millones de animales podrían vivir en hábitats naturales sin estar desamparados. Esto impediría que fuesen cazados, perseguidos, desplazados o exterminados por intereses humanos.
- Millones de animales podrían tener una segunda oportunidad de vivir tras el encierro y las privaciones sufridas.
En una palabra: justicia.
Consecuencias medioambientales del veganismo
- Se reducirían en un 50% las emisiones de metano de origen antrópico, generadas por la ganadería y sus prácticas aberrantes contra los animales.
- Se reduciría entre 5 y 8 veces la huella de carbono per capita, asociada al estilo de vida del humano promedio en países desarrollados.
- Se reducirían ampliamente las emisiones de dióxido de carbono, vinculadas al transporte de animales vivos, de sus productos, secreciones o sustancias producidas, así como la contaminación generada por su incineración.
- Se reduciría ampliamente la deforestación de origen antrópico, generada por la tala de árboles para generar espacio y pastos para el ganado esclavizado.
- Se reduciría ampliamente la desertifición de suelos o la eutrofización de aguas, causados por la ganadería y sus desechos industriales.
- Se reduciría ampliamente la generación y vertidos de plásticos y otros derivados del petróleo, usados como envases.
En una palabra: sostenibilidad.
Consecuencias sociales del veganismo
- Con la producción actual habría —y sobraría— suficientes alimentos para toda la población humana.
- Los humanos podrían ser más respetuosos y pacíficos con los animales, otros humanos y la naturaleza.
- Los humanos dejaríamos de estar sometidos al prejuicio moral del especismo y de incurrir en un sesgo antropocéntrico. La humildad moral conlleva mayor humildad intelectual, científica y va asociada al progreso social.
- Los niños humanos dejarían de ser alienados por los adultos y de perder su empatía infantil a corta edad a causa de una adoctrinación ejercida por nuestra sociedad perversa.
En una palabra: progreso.
Consecuencias económicas del veganismo
- Se reduciría la brecha económica en países en vías de desarrollo asociada a la ganadería o la producción agrícola para el consumo del ganado.
- Surgirían y se desarrollarían nuevos nichos económicos asociados al consumo de productos 100% vegetal.
- Surgirían y se desarrollarían nuevos productos y servicios asociados a un modo de vida vegano, menos contaminante y respetuoso con la naturaleza.
En una palabra: igualdad.
La aceptación global del veganismo cambiaría todo nuestro paradigma económico. Quienes manejan los hilos no permitirán que eso suceda.Conclusión
Como podemos ver, el veganismo es fácil de entender, sencillo de llevar a la práctica y conduce a resultados muy positivos para todos. Sin embargo, suelen aducirse terribles consecuencias de lo que que pasaría si todo el mundo se hiciera vegano porque el veganismo trastoca y trastocaría profundamente los pilares de nuestra civilización.
Nuestra sociedad del siglo XXI están enraizada en la explotación animal tanto o más que durante el periodo Neolítico. Quienes hoy se lucran mediante la crianza de animales, o bien se ubican en nichos económicos relacionados con los animales de alguna forma, no desean reformular sus negocios ni perder potenciales beneficios.
Las élites sociales, con poder y dinero, harán cualquier cosa para impedir este inevitable progreso moral: difamar, atacar, manipular e incluso asesinar a activistas que denuncien estos hechos. ¿Qué harás tú? ¿Investigar para obrar con justicia o repetir las tonterías que digan sobre el veganismo en un programa de salsa rosa?