Las vigilias y la muerte de Regan Russell
Una reflexión sobre las vigilias por los animales y la muerte de Regan Russell
En este artículo me gustaría hacer un llamamiento a la reflexión y a la buena acción de los activistas veganos. Quienes somos veganos y promovemos el veganismo somos la única defensa que tienen los animales ante su explotación y esclavitud. Por ello, tenemos que actuar con templanza y criterio si queremos ejercer acciones eficaces que consigan salvar vidas y acabar con la esclavitud animal.
En junio de 2020 ocurrió un suceso lamentable: una conocida activista, Regan Russell, fue atropellada por un camión que transportaba animales vivos hacia un matadero. Su muerte, como la de cualquier otra persona, es realmente lamentable y debería haberse evitado. Debido a este hecho tan trágico, quisiera incidir en que ni los camiones, ni los mataderos ni los matarifes son el problema del especismo por el que Regan Russell perdió la vida.
Los animales que, a diario, van en cientos de camiones en todo el mundo con destino al matadero son la consecuencia de que la sociedad considere necesario y correcto el consumo de animales. Las vigilias por los animales tienen su utilidad porque logran mucha visibilidad respecto a la esclavitud animal.
Para quien esté muy alejado del movimiento ver en televisión algo así puede resultarle muy chocante. No pasa desapercibido que gente de todas partes se reúna para despedir a los animales antes de su muerte y que reaccionen con esos animales como si fueran humanos.
Por otro lado, estas vigilias por los animales también pueden perjudicar a las víctimas involucradas porque incrementan su estrés por los llantos y las emociones a flor de piel de los activistas y alargan su agonía.
Vigilia por los animales en la ciudad de Glasgow. Pasaban algunos camiones refrigeradores y otros con animales vivos en las cercanías de un matadero local. Los transportistas suelen avisarse entre ellos para cambiar de ruta con el propósito de eludir a los activistas. Cuando se para un camión, los animales suelen asustarse a causa de la tensión en el ambiente y ello les genera un gran estrés que prolonga su agonía.¿Son efectivas las vigilias por los animales?
Si de verdad queremos salvar vidas y lograr el cese de toda forma de explotación animal, no basta con ir a las puertas de un destino inevitable para las víctimas no humanas. La muerte, intencional o no, de Regan Russell y el asesinato de los animales que iban en el camión no deja de ser una consecuencia del principal problema: el especismo.
Para terminar con el perverso régimen de la esclavitud animal, debemos enfocarnos en evitar que la sociedad financie la crianza y asesinato masivo y sistemático de tales animales. Aunque los activistas involucrados en las vigilias deseen lo mejor para los animales y quieran ayudarlos en el último trance de sus vidas, debemos replantearnos si en este tipo de acciones van más enfocadas hacia nuestra fortaleza anímica más que a los deseos de animales hacinados y temerosos de cualquier ser humano.
Aunque se realicen con buena intención, las vigilias por los animales alargan la agonía de estas víctimas y no actúan sobre los verdaderos responsables de estos transportes al mataderos: los consumidores. Ojalá no vuelvan a repetirse muertes como la de Regan Russell.Conclusión
Los activistas que participan en vigilias encuentran que estas actividades refuerzan la razón de por qué dieron el paso hacia el veganismo y los motiva a seguir adelante. Por desgracia, los animales terminan igualmente muertos y estas acciones no sirven para evitarlo.
Los activistas por los Derechos Animales promovemos el activismo educativo y enfocado a la transformación social para así llegar a las raíces del problema. El maltrato animal, la cosificación, la explotación animal y todo tipo de atrocidades son las consecuencias de que los seres humanos nos consideremos superiores a los demás animales por una transmisión cultural.
No basta con pedir un mejor trato ni con criticar el transporte de animales vivos. Ni tampoco tiene sentido promover la práctica del veganismo por salud o medio ambiente, las granjas ecológicas, los sellos de Bienestar Animal, ni pedir gallinas sin jaulas ni alegar que estos cambios perjudiquen a la industria; no lo hacen de ninguna manera y en ninguna forma.
La esclavitud animal seguirá vigente mientras la sociedad los vea como seres inferiores que están a nuestro servicio. Todos los animales merecen respeto porque sienten, padecen, tienen voluntad, deseos y conciencia. Reducir sus intereses inalienables al «sufrimiento», como a menudo lo enfocan las organizaciones bienestaristas que organizan vigilias, incurre en el mismo error que los oprime.
El bienestarismo no reconoce que los animales deseen ser libres de nuestra dominación, merezcan derechos legales; sino que promueve explotaciones compasivas y maneras de explotarlos que eviten gran parte de su sufrimiento. Ello es incompatible con los Derechos Animales.
D.E.P. Regan Russell