bienestarismo

El Día del Trabajador también debe ser para los animales esclavizados

Partido Vegano - Día del Trabajador - Animales esclavizados
El Día del Trabajador homenajea a todos los trabajadores del mundo en reconocimiento de sus derechos laborales. Millones de animales no humanos son obligados a trabajar y no gozan de derechos legales. Son esclavos y no deberían serlo.

En el Día del Trabajador debemos acordarnos de los más oprimidos

El 1 de mayo se celebra el Día del Trabajador. En este día, se recuerda la ardua consecución de derechos laborales y las injusticias, pasadas y presentes, que padecen los trabajadores de todo el mundo. Sin embargo, los trabajadores humanos no son los únicos que padecen injusticias. De un modo semejante a como acontecía durante la esclavitud negra, millones de animales no humanos son obligados a trabajar y no gozan de derechos legales.

Los activistas veganos deseamos acordarnos de los millones de animales esclavizados para realizar trabajos de toda índole. Esto incluye a decenas de miles de bueyes, burros, caballos, elefantes, perros y todas aquellas especies animales domesticadas, domadas o entrenadas para servir a un propósito humano.

A menudo, desde incluso sectores animalistas se aduce que estos animales son trabajadores o parte de la clase trabajadora. En absoluto. Todos los animales del mundo son esclavos: carecen de derechos legales y figuran únicamente como objetos o recursos al servicio del ser humano.

Decir que los animales sean trabajadores significa afirmar que están reconocidos legalmente como trabajadores, que cuentan con plena voluntad para trabajar y que reciben un salario al trabajar. Ninguno de estos tres puntos requeridos es cierto para el caso de los animales. Todos los animales explotados por el ser humano no son trabajadores; sino esclavos. Y no deberían serlo.

Si una sociedad de progreso aspira a acabar con la opresión sufrida por los trabajadores, primero debe liberar a sus esclavos. Carece de sentido lógico y ético que las clases más humildes y oprimidas por la sociedad hablen de justicia o exijan sus derechos mientras oprimen y niegan derechos a otros sujetos a los que designan para labores y tareas fatigosas.

Los demás animales sienten y padecen como nosotros. Poseen sus intereses inalienables y también desean ser libres de nuestra opresión. Reivindiquemos el cese de toda forma de explotación animal y el reconocimiento legal de los animales como sujetos de derecho. ¡Hagámoslo por ellos!